sábado, 15 de agosto de 2009

divagaciones (me gustaría más estar de vacaciones, pero estoy divagaciones)


siempre me he caracterizado por mis chistes malos, y de repente me encuentro con alguien que me los sigue, o incluso me los supera.

Últimamente pienso mucho en el amor.

yo soy una persona muy enamoradiza, a la par que huidiza, escurridiza, despistadiza (bueno esto no existe, pero era por seguir) el caso es que de repente llega un momento en el que tienes que parar, enfrentarte a lo que te viene, y decidir, aunque la decisión no sea la mejor. Hay que dejar de intentar o proyectar, y actuar.

El amor es en realidad un sacrificio. No paro de darle vueltas a eso. El caso es que la última persona de la que me he enamorado, al igual que el resto, es una persona normal, pero he decidido asumirlo, y realizar el sacrificio, para ver lo que se siente. Le doy vueltas. Probablemente en un tiempo me rinda, y lo mande todo a paseo. Por que no quiero que nadie tenga que sacrificarse por mí. Aunque tampoco veo nunca muestras de que nadie lo haga, y eso quizá es lo que me entristece. Si uno no quiere darlo todo, por que voy a hacerlo yo.

He probado a dar lo máximo, llegando a rozar el 100%, un 99,9%. Ese 0,1% ínfimo es lo poco que me queda. Y lo que tengo que intentar hacer que crezca y no desaparezca.

Todo viene a cuento de que existe una persona que creo que siente algo parecido al cariño por mí. Un cariño diferente al que sienten misamigos, o familia, pero muy cercano a ello. Un cariño que trata de decirme qué es lo mejor para mí, qué es lo que quiere para mí, qué es lo que debería hacer con mi vida. Pero no logro verlo claro.

"Tienes que cambiar ciertas cosas, Yoko, si te sacases un poco más de partido"

Pero a mí me duele pensar que yo acepto a todo el mundo como es, me he vuelto más tolerante, y cada uno con sus defectos, pues es una persona maravillosa, todos y cada uno de nosotros.

Entonces yo porqué no soy aceptada como soy por las personas a las que más quiero.

Esta tarde pensaba en un diálogo-monólogo más bien- ficticio que era algo así como.

Te quiero más que a nada en el mundo, mi amor es infinito, si me pides que le ponga un límite, entonces estás pidiéndome que te deje de querer, y entonces este nuevo universo creado para ti se derrumbará, caerán pedazos de cielo, estrellas fugaces que desaparecerán con el viento. Si no sientes nada, entonces deberías saber que el ser humano no puede vivir sin sentimientos, que cada palabra de disgusto hace que quiera curar mis pequeños errores, mis pequeñas disfuncionalidades, pero no soy un ser perfecto aunque quiera. Y si todo lo que crees que se puede arreglar, es arreglable, y tratas de hacerlo, arreglarás a una persona, pero la convertirás en otra. Y entonces yo...Entonces yo me moriré en vida...

No entiendo por qué a la gente le importa tanto mi apariencia. Mis zapatos, mis colores. Cuando renazco de repente, de aquella tristeza de colores neutros, para volver a mi estridencia de costumbre. Tal vez algo infantil, como una nostalgia de los pocos buenos momentos de la infancia, reminiscencias (cómo me gusta esta palabra) de lo que ya no volverá.

Los demás tienen que aceptar y asumir que soy como soy. Yo ya lo hago. Antes, reconozco que no lo hacía, y no era quién para hablar, pero ahora, ahora todo ha cambiado. Y me parece todo bien, lo que hagan lo que dejen de hacer, lo que deshagan, lo que rehagan, lo que sea o tenga que ser.

Considero que si esas personas que quieren tratar de corregirme, se consideran en lo correcto, en lo cierto, se equivocan, y además me demuestran algo que siempre he pensado.

Si no me quieren por lo que soy, ahora, no me podrán querer nunca, puesto que las personas, nunca cambiamos, afortunada o desgraciadamente...

3 comentarios:

barbaria dijo...

Estoy contigo, no vistas al lobo con la piel del cordero. Cada uno es como es y olvídate de críticas destruc...digo..constructivas. ¿Amor es sacrificio? Se sacrifican muchas cosas por amor pero no te sacrifiques a tí misma. A veces el amor se acaba, se desvanace, se evapora y no te gustaría perderte en el proceso. Reserva, comparte, ofrece... pero no lo des todo.Amor es aventura, un viaje incierto que no se sabe donde ni cuando acabará.
Disfruta del recorrido y no eches nada en la maleta que no quieras perder por el camino. ¿vale?

yokopatri dijo...

bueno si, tienes razon, la verdad es que no se de que me quejo.....

barbaria dijo...

Da igual, te quejas divinamente y es un gusto escucharte.