sábado, 10 de julio de 2010

yoko decide

Bueno, no está de más decir que una se alegra de lo bien que le vaya a los demás, pero que a veces no siente que le va bien, o no sabe valorarlo. Lo cierto es que no me puedo quejar... Hay que aprender a valorar lo que uno es, lo que uno se ha ido haciendo. No sé qué haré, si trabajaré o no. Ahora soy yo la que se lo va a pensar, y no el sucio y asqueroso departamento comercial y de cuentas. Para seiscientos cochinos euros y un asqueroso contrato de dos meses que me van a hacer, ni siquiera de cuarenta horas semanales, yo qué sé. Creo que soy una niña pija. Una pija sin saberlo. Me han consentido mucho. Sé que tengo el apoyo familiar, sí, aunque no les haya pedido ni un euro, si me viera en una malísima situación, muchas veces me han dicho que no tengo de qué preocuparme. Es el mal de los de mi generación, que nos lo han dado todo hecho, y que educamos a nuestras proles con dárselo todo, o darles lo que nunca hemos tenido, y cuando lo tenemos todo caemos en el error de que lo que no hemos tenido es lo mejor. PEro no es así, a veces, o casi siempre, todo lo que hemos tenido son cosas que nos han llenado.

ME alegro de que mis padres hayan luchado para estar donde están, a pesar de los malos rollos que alguna que otra vez casi les ha costado una separación, y yo ahora pues lo veo desde fuera y con mi mentalidad, y pienso, si se hubieran separado pues mejor, pero ahora que han luchado y están juntos tras más de treinta años, pienso, olé... eso sí que tiene mérito...

No me admitieron al máster por problemas burocráticos. Aún tengo esperanza, pero estoy mirando de hacerlo en Barcelona, por lo del catalán. Estaría en la península, más cerca de los míos, en el sentido de que para ellos el mar es un impedimento bastante grande, yo no lo veo así, pero bueno. Es mi cambio de mentalidad, que me gustaría a veces ser mallorquina, pero solamente porque me hace gracia. Estoy contenta de ser una madrileña, con cara de japo, co raíces andaluzas, viviendo en mallorca, enamorada del clima, de la isla y de la gente.

A veces me entra nostalgia delpasado, de otros tiempos que he pasado, de otras personas que he conocido, pero la vida es un mero trámite de algo todavía no descubierto.

No iremos en barca, pero no pasa nada... HAce un día espléndido, y yo he cambiado un poco el chip...

No hay comentarios: